ANÁLISIS DE DESEMPEÑO DE UN CICLO TERMODINÁMICO RANKINE CON RECALENTAMIENTO EN EES
Fecha
2025-10-27Autor
JACOME CUASAPUD, DAVID ESTEBAN
SANTACRUZ ROMO, RICHARD ANDRES
Metadatos
Mostrar el registro completo del ítemResumen
A pesar de los avances tecnológicos y la amplia utilización del ciclo Rankine en la generación de
energía eléctrica, su eficiencia aún presenta un margen considerable de mejora, especialmente
en configuraciones supercríticas y de recalentamiento. Las pérdidas irreversibles, o de exergía, en
los principales componentes del ciclo (turbina, caldera, condensador y bombas) continúan
limitando el rendimiento global del sistema y, por tanto, la cantidad de trabajo útil que puede
extraerse del proceso.
Estudios recientes han confirmado que, si bien el recalentamiento y la regeneración son
estrategias efectivas para incrementar la eficiencia térmica y exergética del ciclo Rankine, la
determinación de parámetros óptimos como la temperatura y presión de recalentamiento sigue
siendo un desafío técnico y económico relevante. Por ejemplo, el análisis exergético avanzado de
ciclos Rankine modernos demuestra que las mayores destrucciones de exergía se concentran en
el condensador y los sistemas de recuperación de calor, lo que indica la necesidad de enfocar los
esfuerzos de optimización en estos componentes para lograr mejoras sustanciales en la eficiencia
total de la planta. Además, la literatura reciente destaca que el ciclo combinado supera en
eficiencia exergética al ciclo Rankine con recalentamiento, subrayando la importancia de la
innovación y optimización continua de los ciclos de vapor.
El uso de herramientas computacionales avanzadas, como EES (Engineering Equation Solver),
permite modelar con precisión los estados termodinámicos y realizar análisis detallados de las
pérdidas de exergía bajo diferentes condiciones operativas, facilitando la identificación de
estrategias de optimización aplicables tanto en contextos académicos como industriales. Sin
embargo, la integración efectiva de estos avances en la práctica industrial requiere superar
barreras asociadas a la selección del fluido de trabajo, la reducción de pérdidas de presión y la
gestión de los límites metalúrgicos de los materiales sometidos a altas temperaturas y presiones.


